miércoles, 30 de marzo de 2011

jueves, 24 de marzo de 2011

Capítulo VIII. La antropología se convierte en ciencia: el estudio de la evolución

En este capítulo Esteban Krotz describe un panorama general acerca del desarrollo del conocimiento del otro y asi mismo la manera en que se aborda desde diversas disciplinas a través del tiempo; en donde la pregunta antropológica ha tenido diferentes etapas de acuerdo a las escuelas bajo las cuales se ha abordado la otredad.

Asi comienza por describir el evolucionismo como primera etapa en la conformación del conocimiento antropológico; a su vez nos describe las etapas bajo las cuales se dio la el discernimiento de la experiencia sobre regiones y en ellas intrínsecas las clases sociales.

Es a través de la revisión del progreso cronológico de la visión del mundo, como encontramos la fundación de una ciencia dentro de la historia, en la cual a pesar de no estar definida, ya algunos estudios se comienzan a abordar estrictamente de manera empírica. Krotz nos menciona a Darwin con su teoría, como parte fundamental para la comprensión de la Evolución Cultural (1860); para con esto advertir el comienzo de una naturalización de la antropología.

Para comprender la complejidad cultural siempre ha sido necesario abordar la simplicidad, de ahí deviene la constante inquietud por definir de donde surge la forma de abordar la otredad; esto como parte fundamental para comprender las culturas pre civilizadas más allá de los contrastes.

Años más tarde aparecerían en escena personajes como Maine, Bachofen, Morgan, Tylor y Jhon Lubbock (por citar algunos) con trabajos que permitirían vislumbrar los principales temas para la antropología de finales del siglo XVIII e inicios del XIX, la mayoría de ellos enfocadas a tribus-culturas lejanas que en su manera de describirlas se asemejaban a culturas que vivían en una anacronía con respecto a Europa. Aunque una de las criticas se desarrollaría precisamente en que se debería enfocar la antropología por lo menos a generar contribuciones para la clarificación de problemas de actualidad.

A la postre aparece Childe, Steward y Marshall Sahlins (neoevolucionismo) con una propuesta para la explicar por principios múltiples la otredad a partir de análisis científicos de la evolución cultural de la humanidad, esto en contraposición a lo que se venía trabajando antes de la segunda guerra mundial.

La información que se comenzaría a generar acerca de las culturas, estaría en función de la experiencia, siendo el material etnográfico un medio para analizar sistemáticamente la otredad.

A fines del siglo XIX se desarrolla el término de alteridad, mediante el cual una de las propuestas consiste a grandes rasgos en negar las características corporales como origen de fenómenos sociales (pág. 296). En esta sección del texto, Esteban Krotz revisa la manera en que se generaba el conocimiento a partir de un eurocentrismo que pasaría años más tarde al cronocentrismo, para con ello criticar la postura de proponer conocimiento a partir de la visión del investigador a lo que denomino autismo cognitivo.

Finalmente se realiza una descripción general acerca de lo que la información etnográfica generó a través de los siglos; por un lado comienzan la creación de utopías; entre las que destaca el texto sobre la transformación de un socialismo utópico a un socialismo científico, este ultimo propuesto principalmente por Marx y Engels; es asi como el autor propone la reflexión de la pregunta antropológica partiendo de la exposición con que se ha abordado al otro, para distinguir la legitimidad de la antropología a partir de una metodología que le puede permitir clasificar y descubrir relaciones de causa y efecto en contraposición de una utopía que se basa en división y contradicción.

Krotz, Esteban. La otredad Cultural entre utopía y ciencia.FCE. 2002